🌉 Lisboa, la capital de moda europea
📍 Lisboa (Portugal)
Es la segunda vez que tengo la oportunidad de pasar unos cuantos días en la que ha sido la capital de moda en Europa durante los últimos lustros; Lisboa. Muchos empresarios, emprendedores y autónomos de diferentes países se mudaron al país luso acogiéndose al famoso NHR el cual les proporcionaba unos increíbles beneficios fiscales.
Pero no sólo por el NHR y sus beneficios fiscales es que escogían Lisboa como ciudad de residencia, sino porque es una auténtica maravilla de ciudad.
El auge económico y de tendencia de los últimos años ha sido espectacular. Con la atracción de talento joven extranjero la economía ha experimentado un significativo crecimiento, llegando casi a equipararse al nivel de España, lo que ha derivado en una revalorización exponencial del valor de las propiedades, y esto ha producido a su vez el interés de inversores inmobiliarios extranjeros y nacionales. Como contrapunto a todo esto diré que los precios de los alquileres también han subido exponencialmente a la revalorización, con lo que alquilar una propiedad se ha vuelto algo cada vez más inaccesible.
Pero no era nuestra intención mudarnos a Lisboa, sino simplemente disfrutar de ella, y eso es algo que siempre consigo en cada visita.
Con poco más de medio millón de habitantes, Lisboa se convierte en una capital europea tranquila, poco y con precios al consumo todavía bastante asequibles.
En la segunda visita coincidimos con la «Jornada Mundial de la Juventud» que se organiza cada ciertos años por el vaticano en diferentes países y ciudades, y aquel agosto de 2023 le tocó a Lisboa como ciudad sede. A estas jornadas acude el mismísimo Papa y congrega a cientos de miles de personas, mayormente jóvenes, de todos los rincones del mundo. La ciudad multiplicó por tres su población en aquellos días, con lo que todo estaba literalmente saturado. Por una parte nos gustó esta coincidencia, pues el ambiente era festivo y la multiculturalidad evidente, pero se hacía un poco pesado a la hora de acudir a cualquier lugar, atracción o monumento, pues entre la sofocante calor y la muchedumbre inundando las calles, había momentos en los que echábamos mucho de menos la tranquilidad habitual de aquella capital.
A pesar de todo, sacamos energías de donde pudimos y esquivando a miles y miles de «peregrinos» fuimos a visitar algunos de los lugares más simbólicos de la ciudad como la Torre de Belém, o el Cristo Rei, que siempre me impresiona cuando lo veo.
También aprovechamos el tiempo para visitar el Oceanário de Lisboa, el casino, subirnos en el teleférico, y como no, visitar todo el casco antiguo de la ciudad, donde estuvimos alojados.
Sin duda alguna, Lisboa es una capital que ha dado mucho que hablar en los últimos tiempos, y se ha convertido en toda una moda para la gente joven de los países vecinos, el tiempo dirá si ha sido una moda pasajera, o no.